EL CHEMO SOTO UN PERSONAJE SINIESTRO

Por Redacción de Radio El Faropr.com

Si nos remontamos a la historia, José Chemo Soto y dos de sus hermanos pertenecieron a la División de Drogas y Narcóticos de la Policía Estatal que en la década del ochenta eran muy temidos en el área de canóvanas  y pueblos aledaños. Se cuenta que cuando los jóvenes de canóvanas estaban en la plaza pública, cundía el pánico y gritaban a viva voz, “llegaron los Sotos” y tenían que salir juyendo, para no ser víctimas de sus atropellos y  los abusos de poder de todos ellos.

Se dicen de tantas atrocidades que cometieron los hermanos Sotos como miembros de la Policía Corrupta que todos sabemos existía para esa década de los ochenta, donde se cometían toda clases de violaciones a la ley y barbaridades que en su mayoría las mantenían impunes.

Como cuestión de hechos, uno de los hermanos Soto de nombre Pedro N. Soto y otros agentes más de la División de Drogas de Carolina, bajo la dirección del entonces Capitán Domingo Álvarez, se vieron involucrados en un serio incidente en el que resulto con daños permanentes (parapléjico) de por vida, un joven tras ser atacado a tiros cobardemente por ellos.

Toda esta gente eran parte del aparataje represivo en esa época negra en que en la Policía de Puerto Rico se carpeteaba a los independentistas y operaban aquellos escuadrones de la muerte y donde estaban actuando como los cabros sin ley y por la libre todos aquellos agentes corruptos que asesinaron y cometieron crímenes que al día de hoy aun no han sido esclarecidos.

Este incidente ocurrió en la noche de un 9 de diciembre de 1983, en el Bo. Barraza de Carolina, cuando Pedro N. Soto, tenía a su cargo varios agentes que por instancias y sin motivo fundado de él, la emprendieron a tiros contra Carlos Ruiz Cortes, quien se encontraba en compañía de su novia. El resultado final fue el que una bala penetro por la parte posterior de su vehículo ocasionándole daños a su cuerpo a nivel de su espalda que lo dejaron incapacitado de por vida.

Se dice que alegadamente esta escena fue alterada y trataron hasta de plantarle un arma a la victima para así tratar de justificar sus perversas acciones. Este caso llegó hasta el Tribunal del Primer Circuito de Boston Caso 882 E.2D553 (First Circuit of Boston 1989) 88-1881-88-1882, Gutierrez v. Cartagena. En el mismo prevaleció el demantante Gutierrez, por haberle violado sus derechos civiles y  constitucionales y haber sido privado de su libertad, según dispone la sección 1983 (42 USC) y por otras acciones de daños y perjuicios.

Desiderio Cartagena, fue encontrado culpable y tuvo que pagar unos $150,000.00 dólares de su propio  pecunio personal. El Capitán Domingo Álvarez, tuvo que pagar cerca de $225,000.00 de su propio pecunio por no ejercer una supervisión adecuada e interferir para obstruir la justicia en el esclarecimiento de este asunto.

 Este Capitán Álvarez, era el mismo que fue designado por el extinto Alcalde José E. Aponte de La Torre, quien lo recluto en un puesto como investigador en la Oficina de Asuntos Internos del Municipio de Carolina, brazo  represivo del Régimen Apontista donde hemos denunciado que hasta el día de hoy se prosiguen con las fabricaciones de casos a granel contra sus empleados.

En esa oficina se han violado los cánones de ética de parte de aquellos que torcidamente han practicado la profesión de la abogacía y si no nos creen pregúntenle que fue lo que le pasó al Lcdo. Jesús Zambrana, exdirector de esa oficina a quien querían obligar a mentir y lo  despidieron fulminantemente por negarse a hacerlo.

Vamos a seguir con el hermanito de José  Chemo Soto, Pedro Soto, por estos hechos lo sentenciaron a tener que pagar unos $200,000.00 dólares por sus actos de abuso de autoridad, junto a al Agente Velázquez, multados por unos $30,000.00 dólares y el Agente Gotay por unos $25,000.00 dólares, para resarcir los daños punitivos a la víctima.

 Habiendo puesto de manifiesto con quienes estamos bregando, como por ejemplo la entrevista que le hizo Primera Hora el pasado 11 de noviembre de 2014, en la cual el alegó haber participado en la masacre de My Lai durante su servicio militar en Vietnam. La primera gran mentira de este tipo es que él dice que estuvo sirviendo en su “tour of duty” de 13 meses en Vietnam del 1965 al 1966, como un miembro de la Infantería de Marina. Sin embargo el retrato que Chemo le presento al periodista de Primera Hora de medio cuerpo tiene puesto el uniforme de la Armada Regular y no el del cuerpo de la Infantería de Marina que es un distinto fácil de reconocer para cualquiera que haya servido en las fuerzas armadas.

Segundo que la masacre de My Lai-4 fue en la mañana del 16 de marzo de 1968, o sea dos años después de Chemo haber salido fuera del territorio de Vietnam, si es que estuvo allí alguna vez.

Tercero que quienes participaron realmente en esa masacre fueron los soldados de infantería de la Armada Regular asignados a la compañía Charlie y allí no había ningún miembro de la Infantería de Marina presente como Chemo alega. El objetivo de ese ataque era aniquilar a todo aquello que se moviera, debido a que desde esa aldea operaba el  batallón núm. 48 de la inteligencia del Vietcong.

Cuarto, Chemo miente cuando alego que él fue uno de los que le había pegado fuego a las chozas con varios lanzas llamas, eso es falso porque allí se utilizaron granadas que fueron lanzadas al interior de las chozas las cuales, luego fueron quemadas con antorchas incendiarias de paja que fueron encendidas con tal fin.

Quienes estuvieron a cargo de ese operativo fueron el Capitán Ernest L. Medina, y el Tnte. William Calley, a quien posteriormente le echaron los veinte por esta masacre que fue planeada para dar un “escarmiento” a otros aldeanos cercanos que cooperaban con el Vietcong.

Mire Chemo, cójalo suave con las guayabas podridas, que a su edad eso le hace daño. Recuerde que el arte de mentir es como comer pescado y que uno se puede atrabancar con las  espinas de sus propias mentiras y como dice el refrán es más fácil descubrir a un mentiroso que a un cojo sentado.

Dicho esto, pasamos a lo que venimos luego de todo esta larga introducción. Vamos a ver en detalle como el gran Cacique de Chemo ha mantenido cundido de familiares, parientes y dolientes el municipio de canóvanas, porque para el gran Chemo la “Familia siempre ha sido una institución” que se maneja como una gran tribu con privilegios. Cualquier semejanza entre las alegaciones de Chemo en su alegada participación en la masacre de My Lai, sus ejecutorias en la Policía de Puerto Rico y toda la ensarta de familiares y allegados que ha empleado como Alcalde no es pura coincidencia.

Familiares y allegados empleados por José Chemo Soto en el municipio de canóvanas:

1-Ruth Álvarez (Madre de Joe K. Soto Álvarez , hijo de Chemo).

2-Irma Pérez Pérez (Madre de Alejandro y Jessica Soto Perez, hijos de Chemo).

3-Sara Ramírez Nieves (Expareja de Chemo por 11 años).

4-Crucita Rentas (Actual pareja de Chemo).

5-Luz E. Ramírez Nieves (Hermana expareja de Chemo).

6-Daniel Santiago (Tío de la madre de un hijo de Chemo).

7-Elizabeth Santiago (Abuela materna de Joe Soto Santiago, hijo de Chemo).

8-Joseph Castro Santiago (Hermano por parte de padre de Génesis Soto Santiago).

9-Manuel Alvarez Santiago (Tío de Joe Soto Santiago, hijo menor de Chemo).

10-Nélida Gómez (Cuñada de Chemo).

11-Agustin Rodriguez (Cuñado de Chemo).

13-Kania Gonzáles (Novia de Christian Soto Mojica hijo de Chemo (Chemito) Confinado por narcotrafico.

14-David Soto Gómez (Sobrino de Chemo).

15-Christine Nieves Mojica (Hermana de Christian Soto Mojica hijo de Chemo).

Díganme ustedes si esto no es nepotismo a la novena potencia,

 en violación a todas las leyes de ética gubernamental que regulan el empleo de familiares y allegados, sin que a este momento la OEG haya tomado acción alguna al respecto. Todo este escenario da a demostrar cómo se administra la cosa pública en este atribulado país, por las malditas dinastías de los políticos.

Todos ellos nos imponen a su claque y son quienes siempre nos mantendrán como un pueblo oprimido por la injustica de quienes gozan de toda la impunidad que les provee este indolente sistema para que unos pocos de privilegiados y facinerosos tengan una vida regalada y fastuosa. Ya pronto vendremos con mas, donde sabrán acerca de todos los que están en el guisometro con los “contratitos” en ese municipio y otras cositas mas.