LOS NOMBRAMIENTOS DEL CANECO

Por Redacción de Radio El Faropr.com

El Caneco Víctor Rodríguez Mangual, nuevamente se ha valido del truqueo para conseguirle un puesto como electricista a uno de los empleados que resultaron lesionados y con quemaduras al estar manipulando indebidamente un transformador eléctrico de 480 voltios.

Ahora resulta que le corrieron a ese empleado ese nombramiento como electricista un día después de haber sucedido dicho accidente. Pura coincidencia, verdad, mientras tanto al tipo lo tenían como un trabajador de brigada más y nadie se ocupaba de él, hasta que surgió el “break down crisis” con la situación del transformador de los 480 voltios.

Hay que ser demasiado sanano e imbécil para pensar que en el municipio de carolina y muy en particular en ese departamento de obras públicas, son tan generosos como para estar otorgando ese tipo de nombramiento en “fast track”de la noche a la mañana. A nadie allí le hacen ese tipo de concesión si no existen unas razones muy válidas para ello.

Conocemos de primera mano cómo es que operan en ese lugar y lo que tienen que luchar los trabajadores allí para que los consideren para algún puesto. Allí los últimos allegados políticos y familiares del Caneco que llegan siempre últimos son los primeros que entran por la puerta ancha, los demás no pasan.

Como cuestión de hechos allí hay un empleado de muchísimos años de servicio allí que tiene un puesto como trabajador y al tipo lo envían a hacer todo tipo de trabajo y él lo hace. Ese empleado ha estado operando un compresor con una escopeta para romper aceras y estructuras de hormigón.


Esa labor es una de alto riesgo ya que todos los empleados que han pasado por ahí han salido seriamente lesionados de la espalda al extremo de que le han impedido volver a realizar esas funciones. De esos hay como unos cinco que ya han pasado por ello. El empleado que está haciendo ese duro y riesgoso trabajo sabe cómo hacerlo sin lesionarse, porque el mismo requiere un tanto de malicia y experiencia en su manejo para no dejarse lastimar de la escopeta cuando se hace algún trabajo de demolición.

Ese trabajo conlleva un puesto y retribución como operador de equipo liviano, pero el Caneco explotador de trabajadores, utiliza a un simple trabajador dice él que para economizarle dinero al municipio. Al Caneco poco le importa la salud ocupacional de sus trabajadores y cuando este se rompa la espalda tarde o temprano, dirá sin inmutarse que pase el próximo.

Hemos visto una foto de un antiguo operador de equipo liviano que salió lesionado de ese puesto, cuando el Caneco lo puso solo y sin ayuda a tratar de romper una piedra de una laja inmensa en los predios del Estadio Roberto Clemente. Resultado final ese empleado salió con la espalda hecha pedazos y terminaron moviendo la piedra con un “Digger” para luego enterrarla a la rivera del Rio Grande. En verdad que fuimos testigos del desprecio y el odio que el Caneco, siente por la gente de color y esa foto así lo confirma. Eso fue un castigo lleno de malicia y crueldad, contra una persona trabajadora y humilde que su único pecado fue llevar su color de piel a mucha honra y orgullo.

El Caneco, nunca ha sido un tipo bondadoso y agradecido, el todo lo hace con un interés particular que solo responda a sus ambiciones personales. Es frio y calculador y ataca por las espaldas a traición en el momento oportuno como una bestia depredadora.

Advertidos quedan todos los funcionarios que se hayan prestado para otorgar un nombramiento “de facto” y “ultra vires” con la intención de poder manipular un burdo acto de negligencia patronal que ha afectado la salud ocupacional de un trabajador. Esto en una escena de un crimen, tendría el efecto  de tratar de alterar una escena, para cambiar y extrapolar los resultados de una investigación. La CFSE y OSHA tienen que practicar una investigación al respecto, para que vean como en el municipio de carolina se juega con la salud ocupacional de sus trabajadores, sin que les tiemblen las manos de una forma prístina e imparcial.


El tratar de defraudar a las propias agencias de gobierno que tienen el deber ministerial de investigación es una acción condenable contra la función pública que puede acarrear serias consecuencias a todos aquellos que se presten para cometer ese tipo de acción retroactiva para tratar de darle marco de legalidad a este asunto y de cuadrar la escena que les interesa proyectar para protegerse. En mi pueblo a esto le llaman mitigación de daños y “Sacan el culin non pillaré”.

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