EL BURULEO EN OBRAS PÚBLICAS Y ORNATO

Por Redacción de Radio El faropr.com

Pica y se extiende, los asuntos que transcurren en obras públicas y ornato bajo la dirección del Caneco Víctor Rodríguez Mangual. Nuestros fuentes destacadas en ese lugar nos informan que al otro día del accidente le crearon en “fast track” una plaza como electricista, al empleado que resultó con  lesiones y quemaduras al ser enviado por el Caneco a trabajar con un transformador eléctrico de 480 voltios sin tener ninguna capacidad pericial o técnica para ello. Se dice que se ha montado un operativo para recogerle días a ese empleado ya que no tiene balance para seguir cobrando. La Corporación del Fondo del Seguro del Estado debe advenir en conocimiento sobre estos hechos para que sean investigados.

Dicen que ese “reconocimiento” es para callarle la boca a ese empleado para que este no tome acción legal alguna en contra el municipio. Por otro lado nos informan que el obstinado y terco incompetente del Caneco, terminó enviando a una compañía privada de electricistas para resolver el problema que había con dicho transformador, cosa que tenía que haber hecho desde el principio, sin tener que haber puesto en peligro las vidas humanas de esos dos trabajadores.

Paradojas de la vida, dicen que uno de esos trabajadores que resultó con quemaduras leves es de apellido Rodríguez y es hijo de un hermano del Caneco. Sería bueno se investigara a cuantos familiares tiene el Caneco empleados a todo lo largo y lo ancho del municipio de carolina y si han tenido una dispensa y autorización de la OEG para ello. De no ser así estarían todos los implícados en una franca violación a las leyes que regulan el nepotismo y sujeto a las acciones y sanciones económicas que la OEG determine.

Cada día que pase le habremos de demostrar quién es este individuo del Caneco que se ha abierto paso empujando y haciendo todo el daño posible a otras personas, con tal de ganarse la empatía de sus superiores, que no son más que una partida de  desaprensivos e indolentes y gente de bajo perfil que pasan como unos “Honorables” de cartón en esa Cacolandia y su mundo de los “Walking Dead”.