LOS ADULADORES DE RIO GRANDE
A más de seis (6) meses desde que el corrupto ex-alcalde de Rio Grande, Edward Rivera
Correa, fuera apresado y haberse declarado culpable de todos los cargos que
pesan en su contra. Es con gran pesar que a diario tenemos que ver en Rio
Grande a la entrada de la Urbanización Jardines y en plena carretera número 3 y
aún en pie un rótulo con su foto y su sonrisa fingida de un bonachón angelical.
Los ciudadanos responsables y honestos que todas las
mañanas tienen que madrugar y salir a ganarse honradamente el pan de cada día y
a transitar en sus vehículos para someterse a las presiones diarias del tapón y
más aún el llegar vivos a sus destinos. Es triste los que aportamos al sistema
contributivo y al sistema de la vida diaria Boricua y tener que comenzar el día viendo la foto de un
corrupto confeso y de marca mayor al cual unos cuantos aduladores le prosiguen
rindiendo pleitesías como la adoración sin fundamentos de una falsa deidad, ¡Qué
Barbaridad!.
Parece ser que los valores y principios en Rio Grande,
han tocado fondo y han colapsado a la degradación moral más baja en su historia.
Se le rinde culto plenipotenciario a aquellos ídolos con pies de barros que sus
méritos son el haber obrado de espaldas a la ley y a las más sanas normas de
honradez.
Es una ofensa a la moral y una falta de respeto a los
ciudadanos de Rio Grande el mantener esa indignante foto en ese lugar. Si bien
es cierto que Eduard Rivera Correa, pudo haber realizado muchas obras en este
pueblo, a fin de cuentas ese era su deber y por eso era retribuido muy bien.
También es justo recordar y tener presente que él nos robó y abuso de nuestra confianza. Como
dice la canción prohibido olvidar.
Los aduladores abundan en todas partes. Es por eso que
los hombres enhestados y embriagados por el poder, se complacen tanto
verlos de rodillas ante sus obras
siniestras, de tal modo que se engañan y corren el peligro de eventualmente
serán fragmentos de seres despreciables. Al nuevo incumbente de la poltrona
municipal de Rio Grande, dime con quién andas y te diré quién tu eres, si el
actual alcalde era el colector mayor de Eduard Rivera de sus extorciones, por
eso lo venera y lo mantiene con un homenaje a un delincuente común.
El nuevo
Alcalde NO debe hacerse cargo de esa pesada y sucia misión de tratar de lavar
la mugre de un rostro de accionar culposo que le traerá muchas calamidades. Debe
cortarse ya ese obligo putrefacto y utilizar su propio albedrío de tal manera
que nadie le embarre y le salpique con sus torcidas acciones. Si el Alcalde de
Rio Grande es un hombre de principios y de recto proceder ahora es el momento
en que debe demostrarlo al pueblo de porque no se puede servir a dos señores a la
misma vezo te peina o te hace rolos.
Quién rinde cultos a personajes siniestros, por culpa
de las malas influencias de los aduladores y fanáticos extremistas que tanto
daño hacen con sus mentiras, estará condenado a tener que purgar las
consecuencias de sus actos. No hay otra manera de evitar la adulación que el
hacer comprender a los hombres que no ofenden al decir la verdad, y resulta
que, cuando todos pueden decir la verdad monda y lironda, y nos faltan el respeto
descaradamente.
Por tanto un
buen dirigente debe de rodearse de hombres de buen juicio, a los que dará la
libertad de decir la verdad de frente. Deberá tener oídos para oír los grandes
retos que deberán de aceptar con gallardía y sin ser o convertirse en monigotes
de nadie y mucho menos convertirse en un “alter ego” de un delincuente de
cuello blanco y con corbata que debe pagar a la sociedad, por sus desmanes y
desvaríos. Alcalde, el pueblo de Rio Grande, le exige que acabe de una vez por
todas de sacar ese retrato que nos mantiene cabizbajos y con vergüenza ajena.
Usted mejor que nadie sabe que Rio Grande un pueblo cristiano que cree en las
buenas costumbres y que a la hora de decidir, quién no reflexiona, pierde por
culpa de esos mismos aduladores que luego les darán la espalda, para seguir con
su fatídica misión, meta mano ni un día más con ese retrato en pie derrúmbelo por
favor ya delo contrario usted se declara culpable de ser cómplice del
latrocinio y el robo al pueblo de Rio Grande ¡atrévase Ya! ¡Carajo!.
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