LA FALSA GIGANTE DE CAROLINA
Por Redacción
de Radio El Faropr.com
Con un
presupuesto millonario de muchos billetes verdes $$$$$ para colocar anuncios y pautas radiales en la
prensa colonial que actúa como un escudero de armas, el municipio de Carolina,
trata de esconder su verdadero rostros de verdugos ante este país. Su Alcalde
José Carlos Aponte, recurre a los grandes bufetes de abogados, millonariamente
muy bien retribuido$$$$$ para tratar de destruir y aplastar todo intento de
cualquier empleado que se atreva a radicar una querella contra ellos.
Un empleado que
radique un caso ante un foro administrativo o
judicial sabe que deberá enfrentarse a toda esa maquinaria que opera
como una poderosa muralla de la OTAN y
que lo van a llevar por un angustioso y
tortuoso camino de forma tal que desista de sus esfuerzos. Sin embargo hay que
vestirse de valor y contra viento y marea, combatir al enemigo con fuerza,
porque contra el mal no se puede ser débil y esta es una batalla entre el bien
y el mal.
Dicen que para muestra con un solo botón basta y prueba
de ello lo es el Informe de Auditoria # M-13-30 del 26 de abril de 2013,
revelan serios hallazgos que apuntan en la dirección de que el Municipio de
carolina es un patrono que violentan las leyes laborales en detrimento de los
derechos que le asisten a sus empleados que ocupan puestos a nivel
transitorios.
En dicho informe se establece claramente en la página
#14, Hallazgo #5 Empleados clasificados como transitorios por periodos que excedían
los términos establecidos por ley, lo siguiente: Dicho hallazgo reveló que al
31 de diciembre de 2014, el municipio de Carolina no cumplió con el artículo
11.004(C) de la ley #81-1991, al mantener en un estatus transitorio a unos 130
empleados que excedieron por más de un año en sus puestos. Dichos empleados
fueron mantenidos en esos puestos entre unos 13 y 42 meses.
Efecto: La situación comentada impide mantener una
administración adecuada de los recursos humanos.
Causa: Atribuimos la situación comentada a que el Alcalde
y la Directora de la Oficina de Recursos Humanos, no cumplieron con la
disposición de la citada ley.
Al no cumplir con el propósito de dicha ley, ambos
funcionarios no protegieron los derechos que les asistían a esos empleados y
los mismos fueron privados de ser nombrados a puestos dentro del servicio de
carrera (regular). Dicha ley claramente
establece que los nombramientos transitorios no podrán exceder de un año, con
excepción de las personas nombradas en proyectos especiales de duración fija,
sufragados con fondos federales o estatales, cuyos nombramientos correspondan a
las normas que disponga la ley bajo la cual sean nombrados.
En dicho informe consta que el Municipio de Carolina,
trató de llevar a cabo sus defensas afirmativas con sus argumentaciones y de
vender su teoría que ellos mismos, ni se las creen, solo para tratar de
justificar sus acciones, pero la Oficina del Contralor les mantuvo en efecto
como válido dicho señalamiento, el cual prevalece en su informe al día de hoy.
Ya sabemos del mal trato a que son sometidos los
empleados transitorios, a los cuales quieren explotar al máximo y son
discriminados con acciones como esta. A esos empleados son los que usted ve por
ahí bajo agua, sol y sereno dando el máximo esfuerzo para obtener un empleo
digno y unas expectativas futuras de estabilidad laboral, que son anuladas y
marchitadas con su posterior suspensión bajo treta y engaño. Les ofrecen el cielo y la gloria y los mantienen con en
ese letargo de duérmete nene, hasta que los exprimen y luego los desechan
porque para el Régimen Apontista, ellos son solo vistos como recursos reemplazables,
como si fueran fichas en un tablero. Así las cosas, vemos como se proyecta y se
levanta toda falsa imagen pública, de este mentiroso patológico y mitómano,
pidiendo lo que él nunca ha estado dispuesto a darles a sus empleados más
humildes.
Sin embargo por su gerente de seguridad y sus desmanes
y desvaríos ha metido las manos al fuego, sin medir las consecuencias de sus
actos, cuando pretende defender a capa y espada lo repudiable y lo indefendible.
En ese mundo de la Cacolandia-Apontista, todo está al revés e invertido como en
el país de macondo. A algunos de esos empleados que sabemos están pasando por
esta situación, tienen dos opciones; Una o luchan por sus derechos o Dos, se mantienen de rodillas en espera de
cuándo el Régimen Apontista, disponga y decida ejecutarlos decapitados al
estilo de Isis.
Todo este montaje publicitario para tratar de limpiar
la mugrienta imagen real de este personaje siniestro del Principito José Carlos
Aponte y su colonia de virus mutantes y de mojigangas que solo pretenden con
toda esa ñoñorrea de Cacolandia Segura y en Paz. Todo eso es pura filfa, porque
nosotros no creemos en la ilusión óptica y el espejismo que nos quieren proyectar
como si la luna fuera de queso y se
comiera con miel. A los manipuladores de la verdad, que sepan que nunca habrá
un crimen perfecto, todo a su tiempo y lugar y al final del camino brillará la
justicia divina sobre la injusticia terrenal de los hombres enhestados y
perversos.
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