CAROLINA ¡NO NOS ROBARÁN EL CAMBIO!
Por Jose Cheo Cruz Por lo que he visto, cuanto menos comprenden los ignorantes lo que mastican los discurseadores políticos, más crédito les conceden. El límite de sus capacidades para razonar, asimilar, degustar y concluir por análisis propio sobre la factibilidad o no de propuestas y promesas, favorece a los fabricantes de estructuras que llegan al oído y de ahí se devuelven porque no alcanzan penetrar al cerebro. Aristóteles decía que al pueblo le trae sin cuidado saber, porque lo que quiere es creer. Hoy, para “creer” tiene que ver dinero o puesto seguro. Visto que el pueblo inculto no requiere de mucha inteligencia para comprender la realidad de que esta democracia solo sirve para fabricar nuevos ricos cada cuatro años, Cuatro años más, no le basta la palabrería floreteada si no viene acompañada de la pitanza. El aspirante a cargo debe llenar bien la bolsa antes de salir a la calle a repetir la misma manoseada retórica, porque si tras la palabra no se abre la bolsa o el